Dr. Vino trae un artículo sobre el reciclaje de las botellas de vino, que me parece muy interesante de revisar.
Sin duda, la industria del vino tiene que asumir un liderazgo en los temas de eficiencia energética y reciclaje.
Acá va el blog
Thursday, July 30, 2009
Monday, July 27, 2009
Wikén: Burbujas para todo(s)
Le salió competencia al pisco sour: nuestro aperitivo-emblema está siendo desplazado por el vino espumoso. Porque es más liviano, tiene menos calorías y además va bien con todo. Ya es un hecho: las burbujas se están imponiendo.
El Mercurio, 24 de julio de 2009
Bárbara Muñoz S.
1 Qué elegir: Una gran noticia para los amantes de las burbujas: llegó a Chile el prestigioso champagne Drappier. De Francia, claro. Porque a riesgo de ser majaderos, hay que recordar que sólo se puede hablar de champagne cuando se trata del producido en la región homónima y que al resto (como a los chilenos) hay que llamarles vinos espumosos o espumantes, aunque suene menos glamoroso. La cosa es que Drappier es un lujo-lujo de champagne que llega a Chile a un precio bastante accesible para este tipo de joyitas (desde $13.800 a $38.400) y su dueño, Michel Drappier, confía en que le irá bien por estas tierras: "Los chilenos tienen paladar para reconocer el sabor de la fruta de verdad y nuestros vinos deberían calzar con ese paladar", dice. Otro que llegará es el Gran Cuvée de Casa Boher, un espumante argentino reconocido por su calidad, y del que ya se puede probar su versión extra brut.
2 Cuándo beberlo:Siempre. No hay para qué guardar la botella hasta que alguien se gradúe, case, inaugure un barco o celebre Año Nuevo. "Nada de esperar ocasiones especiales", dice el periodista especializado Patricio Tapia. "Este estilo de vinos se adapta a las más variadas circunstancias". Incluso no hay ni que esperar a que sea mediodía: uno de los hábitos más chic -en Francia por supuesto- es comenzar el día con una copa. "Una gran costumbre, muy civilizada, es beberlo a la hora del desayuno, con frutillas", cuenta Tapia.
3 Por qué preferirlo:De que al pisco sour le salió gente al camino, ya no hay dudas. El espumante está en vías de convertirse en el nuevo aperitivo favorito del chileno. Y no sólo eso. Hoy muchos lo prefieren para acompañar toda la cena. De principio a fin. Porque es suave, no tapa los sabores y armoniza bien con las comidas. En los últimos cinco años el consumo de espumantes en Chile ha aumentado al menos en un 10% y la mujer ha sido una de las principales responsables de su boom. Está claro por qué: es más liviano, tiene menos graduación alcohólica (12,5°) y, sobre todo, menos calorías que otros tragos (según un estudio del INTA, un espumante brut tiene 96 calorías cada 100 ml.). Luego fueron los jóvenes quienes se unieron al fenómeno. Fue cuando aparecieron las onderas botellitas individuales de 187 cc. o 200 cc. y entonces se hizo mucho más cool tomarse en un bar una de ésas, que una cerveza o un vino. Despertar al día siguiente, además, se hacía mucho más fácil.
Otra explicación para el boom de las burbujas la entrega Olivier Jeannot, dueño del bar Étniko. Según la experiencia en su bar de Bellavista, cada vez son más las parejas que en lugar de pedir una botella de vino, ordenan una de espumoso. "A veces piden hasta tres botellas por noche", dice. Las ventas de este tipo de vino se han disparado en los últimos dos años: antes vendía una caja al mes, ahora vende seis. Y eso que sólo tiene brut.
4 Cómo combinarlo
No hay restricciones: puede beberlo antes, durante o después.
Con postres. Si antes se usaba acompañar el postre con cerveza negra, ahora también se estila hacerlo con espumante. En el restaurante Ópera, el postre Ópera Imperial (una tartaleta rellena con mousse de chocolate y que lleva crema de trufa, chocolate blanco y helado de avellanas), viene con una copa de champagne Moët & Chandon Néctar Imperial de regalo. Cuesta $5.000. José Miguel de la Barra, esquina Merced. 6643048.
Con cebiches. Es la nueva moda: cebiche + vino espumante. Una opción es experimentar la mezcla en la casa; la otra, irse derecho al hotel Marriott. Allí, todos los sábados -hasta el 29 de agosto- entre 19 y 21 horas, tendrán un buffet con cinco tipos de cebiches que armonizan con espumosos de Cuvée Mumm. $13.500 p/p. Av. Kennedy 5741, 4262058.
Con ostras, trufas, foie gras o caviar. Combinar ostras con champagne no es novedad, pero ¿existe algo mejor? En el restaurante Nolita proponen varios platos con ostras de Calbuco en diferentes formatos, ideales para maridar con espumosos (tienen más de 40 etiquetas entre espumantes y champagnes). Además hay platos con caviar, trufas y foie gras que combinan a la perfección con las burbujas. Isidora Goyenechea 3456, 2326114. 5 Dónde encotrar y cuánto cuestaEn restaurantes como La Cascade, C, Happening, Puerto Fuy, Nolita, Europeo y Ópera, se pueden pedir espumosos y champagne por copas.
En bares como Catedral, Étniko, Rai, Duke's y Ky, tienen tragos que combinan espumosos con jugos de fruta (el de arándano es el más exitoso), bebidas energéticas y otros licores; y en el Centro Cultural Amanda y bar Constitución tienen botellas individuales. Para comprar botellas, en Wain (9536290) tienen Casa Boher Extra Brut, $13.800 y cuatro versiones de Drappier: Carte d'Or Brut 750 cc., $35.400; Carte d'Or Brut 375 cc., $19.340; Carte d'Or Brut 200 cc, $13.800; y Rose 750 cc, $38.400.
Otras buenas opciones son La Vinoteca (3433607), El Mundo del vino (5841172) y La Cav (3938000).
El Mercurio, 24 de julio de 2009
Bárbara Muñoz S.
1 Qué elegir: Una gran noticia para los amantes de las burbujas: llegó a Chile el prestigioso champagne Drappier. De Francia, claro. Porque a riesgo de ser majaderos, hay que recordar que sólo se puede hablar de champagne cuando se trata del producido en la región homónima y que al resto (como a los chilenos) hay que llamarles vinos espumosos o espumantes, aunque suene menos glamoroso. La cosa es que Drappier es un lujo-lujo de champagne que llega a Chile a un precio bastante accesible para este tipo de joyitas (desde $13.800 a $38.400) y su dueño, Michel Drappier, confía en que le irá bien por estas tierras: "Los chilenos tienen paladar para reconocer el sabor de la fruta de verdad y nuestros vinos deberían calzar con ese paladar", dice. Otro que llegará es el Gran Cuvée de Casa Boher, un espumante argentino reconocido por su calidad, y del que ya se puede probar su versión extra brut.
2 Cuándo beberlo:Siempre. No hay para qué guardar la botella hasta que alguien se gradúe, case, inaugure un barco o celebre Año Nuevo. "Nada de esperar ocasiones especiales", dice el periodista especializado Patricio Tapia. "Este estilo de vinos se adapta a las más variadas circunstancias". Incluso no hay ni que esperar a que sea mediodía: uno de los hábitos más chic -en Francia por supuesto- es comenzar el día con una copa. "Una gran costumbre, muy civilizada, es beberlo a la hora del desayuno, con frutillas", cuenta Tapia.
3 Por qué preferirlo:De que al pisco sour le salió gente al camino, ya no hay dudas. El espumante está en vías de convertirse en el nuevo aperitivo favorito del chileno. Y no sólo eso. Hoy muchos lo prefieren para acompañar toda la cena. De principio a fin. Porque es suave, no tapa los sabores y armoniza bien con las comidas. En los últimos cinco años el consumo de espumantes en Chile ha aumentado al menos en un 10% y la mujer ha sido una de las principales responsables de su boom. Está claro por qué: es más liviano, tiene menos graduación alcohólica (12,5°) y, sobre todo, menos calorías que otros tragos (según un estudio del INTA, un espumante brut tiene 96 calorías cada 100 ml.). Luego fueron los jóvenes quienes se unieron al fenómeno. Fue cuando aparecieron las onderas botellitas individuales de 187 cc. o 200 cc. y entonces se hizo mucho más cool tomarse en un bar una de ésas, que una cerveza o un vino. Despertar al día siguiente, además, se hacía mucho más fácil.
Otra explicación para el boom de las burbujas la entrega Olivier Jeannot, dueño del bar Étniko. Según la experiencia en su bar de Bellavista, cada vez son más las parejas que en lugar de pedir una botella de vino, ordenan una de espumoso. "A veces piden hasta tres botellas por noche", dice. Las ventas de este tipo de vino se han disparado en los últimos dos años: antes vendía una caja al mes, ahora vende seis. Y eso que sólo tiene brut.
4 Cómo combinarlo
No hay restricciones: puede beberlo antes, durante o después.
Con postres. Si antes se usaba acompañar el postre con cerveza negra, ahora también se estila hacerlo con espumante. En el restaurante Ópera, el postre Ópera Imperial (una tartaleta rellena con mousse de chocolate y que lleva crema de trufa, chocolate blanco y helado de avellanas), viene con una copa de champagne Moët & Chandon Néctar Imperial de regalo. Cuesta $5.000. José Miguel de la Barra, esquina Merced. 6643048.
Con cebiches. Es la nueva moda: cebiche + vino espumante. Una opción es experimentar la mezcla en la casa; la otra, irse derecho al hotel Marriott. Allí, todos los sábados -hasta el 29 de agosto- entre 19 y 21 horas, tendrán un buffet con cinco tipos de cebiches que armonizan con espumosos de Cuvée Mumm. $13.500 p/p. Av. Kennedy 5741, 4262058.
Con ostras, trufas, foie gras o caviar. Combinar ostras con champagne no es novedad, pero ¿existe algo mejor? En el restaurante Nolita proponen varios platos con ostras de Calbuco en diferentes formatos, ideales para maridar con espumosos (tienen más de 40 etiquetas entre espumantes y champagnes). Además hay platos con caviar, trufas y foie gras que combinan a la perfección con las burbujas. Isidora Goyenechea 3456, 2326114. 5 Dónde encotrar y cuánto cuestaEn restaurantes como La Cascade, C, Happening, Puerto Fuy, Nolita, Europeo y Ópera, se pueden pedir espumosos y champagne por copas.
En bares como Catedral, Étniko, Rai, Duke's y Ky, tienen tragos que combinan espumosos con jugos de fruta (el de arándano es el más exitoso), bebidas energéticas y otros licores; y en el Centro Cultural Amanda y bar Constitución tienen botellas individuales. Para comprar botellas, en Wain (9536290) tienen Casa Boher Extra Brut, $13.800 y cuatro versiones de Drappier: Carte d'Or Brut 750 cc., $35.400; Carte d'Or Brut 375 cc., $19.340; Carte d'Or Brut 200 cc, $13.800; y Rose 750 cc, $38.400.
Otras buenas opciones son La Vinoteca (3433607), El Mundo del vino (5841172) y La Cav (3938000).
Patricio Tapia: El pinot aún busca su destino
El Mercurio, 24 de julio de 2009
Como es costumbre, el Valle de Casablanca presentó las nuevas cosechas de Pinot Noir, una cepa que aún es tarea pendiente en Chile.
Hacer un buen pinot noir, uno delicado, que huela abundantemente a frutas rojas frescas, que tenga un cuerpo suave, chispeante, ligero y refrescante, pero que a la vez sea profundo y llene la boca, no es un asunto fácil. Ni siquiera en la Borgoña, la gran tierra del pinot, donde nacen algunos de los tintos más espectaculares del mundo.
Así es que Chile no tendría por qué ser la excepción. Demasiado sol que quema la delicada piel del pinot, falta de suelos arcillo-calcáreos que otorguen la tan ansiada mineralidad y, quizás, algo menos de calor para que el pinot madure tranquilamente, sin sobresaltos. Todos ésos pueden ser factores que influyen. Y también, por cierto, la tendencia a producir pinot noir demasiado corpulentos, como para impresionar, pero que no responden a su carácter delicado.
Sea lo que sea, los pinot noir chilenos están en camino de autobúsqueda, lo que quedó claro luego de la tradicional presentación de la nueva cosecha que cada año realiza el Valle de Casablanca. Esta vez fue la vendimia 2008, un año al parecer complejo, con un final de temporada de calores potentes que forzaron y apuraron demasiado el tranco lento y pausado del pinot.
El asunto es que luego de probar las trece muestras de este año -once de 2008 y dos de 2007- queda la sensación de que hay algo de desorientación o, viendo el vaso medio lleno, una fuerte tendencia a la experimentación. Para mí el resultado general es que esta serie de pinot -prontos a salir al mercado- son demasiado generosos en dulzor, empalagosos a veces, sin frescos y con niveles de alcohol que siempre están sobre los 14. Así, con esa madurez, es difícil obtener lo que se llama "tensión", una suerte de balance entre una acidez fresca, una textura fibrosa y un gusto a frutas rojas que, más que maduras, parecen crujientes. Esa tensión, en general, no se ve.
Es probable que se esté cosechando muy tarde en busca de texturas más suaves, pero obteniendo uvas muy dulces en ese intento. O que se esté sobreextrayendo mucho, poniendo músculos excesivos. Es como ir a levantar pesas, cuando lo que necesita el pinot es alejarse de las mancuernas e ir directamente al spa por un buen masaje.
Como es costumbre, el Valle de Casablanca presentó las nuevas cosechas de Pinot Noir, una cepa que aún es tarea pendiente en Chile.
Hacer un buen pinot noir, uno delicado, que huela abundantemente a frutas rojas frescas, que tenga un cuerpo suave, chispeante, ligero y refrescante, pero que a la vez sea profundo y llene la boca, no es un asunto fácil. Ni siquiera en la Borgoña, la gran tierra del pinot, donde nacen algunos de los tintos más espectaculares del mundo.
Así es que Chile no tendría por qué ser la excepción. Demasiado sol que quema la delicada piel del pinot, falta de suelos arcillo-calcáreos que otorguen la tan ansiada mineralidad y, quizás, algo menos de calor para que el pinot madure tranquilamente, sin sobresaltos. Todos ésos pueden ser factores que influyen. Y también, por cierto, la tendencia a producir pinot noir demasiado corpulentos, como para impresionar, pero que no responden a su carácter delicado.
Sea lo que sea, los pinot noir chilenos están en camino de autobúsqueda, lo que quedó claro luego de la tradicional presentación de la nueva cosecha que cada año realiza el Valle de Casablanca. Esta vez fue la vendimia 2008, un año al parecer complejo, con un final de temporada de calores potentes que forzaron y apuraron demasiado el tranco lento y pausado del pinot.
El asunto es que luego de probar las trece muestras de este año -once de 2008 y dos de 2007- queda la sensación de que hay algo de desorientación o, viendo el vaso medio lleno, una fuerte tendencia a la experimentación. Para mí el resultado general es que esta serie de pinot -prontos a salir al mercado- son demasiado generosos en dulzor, empalagosos a veces, sin frescos y con niveles de alcohol que siempre están sobre los 14. Así, con esa madurez, es difícil obtener lo que se llama "tensión", una suerte de balance entre una acidez fresca, una textura fibrosa y un gusto a frutas rojas que, más que maduras, parecen crujientes. Esa tensión, en general, no se ve.
Es probable que se esté cosechando muy tarde en busca de texturas más suaves, pero obteniendo uvas muy dulces en ese intento. O que se esté sobreextrayendo mucho, poniendo músculos excesivos. Es como ir a levantar pesas, cuando lo que necesita el pinot es alejarse de las mancuernas e ir directamente al spa por un buen masaje.
Saturday, July 18, 2009
Patricio Tapia en Wiken: Tres cepas ascendentes
El Mercurio, viernes 17 de julio de 2009 Patricio Tapia
Este mes el panel de cata de Wikén probó tres uvas tintas que dan de qué hablar y que, por cierto, son ideales para el invierno: Cabernet Franc, Petit Verdot y Carignan.
La oferta de cepas en nuestro país se da vueltas en los clásicos, especialmente franceses: cabernet sauvignon, syrah y merlot. También, por cierto, la muy de moda pinot noir y la "chilena" carmenere. Más allá de ellas, todo es novedad. Por eso decidimos evaluar tres variedades nuevas, las que a nuestro juicio tienen más posibilidades de pasar al grupo de los best seller.
El carignan es una de ellas. Generalmente proviene del sur de Chile, de la región del Maule y más allá, y ofrece un lado rústico, a campo. Los vinos de carignan son duros, astringentes, para comerlos con prietas o longanizas, pero también son muy perfumados y con una fresca acidez. Nuestro ganador fue precisamente un carignan, así es que pudimos ver su potencial.
El petit verdot es un viejo actor secundario en la zona de Burdeos, en Francia, tierra de algunos de los más célebres tintos del planeta. Nuestro clima le agrada al petit verdot, así es que es lógico que sea una cepa emergente.
Y también el cabernet franc, por cierto. Algunos de los más perfumados y jugosos tintos de Francia se hacen con esta cepa en el Valle del Loire, pero también toma mucho poder en Saint Emilion, donde es un clásico. En Chile hay una buena batería de exponentes, pero aún no logra integrar el pódium de las más reconocidas.
91 BotalcuraLa Porfía Cabernet Franc 2006, Curicó.
Buen aroma a frutas rojas frescas, en una textura suave y redonda. En la boca tiene un rico aroma a menta y a hierbas, todo moldeado por una fresca acidez. Este es el tipo de vinos que uno podría descorchar con un costillar de cerdo. $7.900 (Wain).
87 Santa CarolinaBarrica Selection Petit Verdot 2007, Rapel.
Es un vino potente, grande, con una textura que se siente dura todavía. Los aromas van más bien por el lado del café y el chocolate, con fruta negra. Un clásico tinto para días de invierno. $4.695 (Wain | Lider)
91 MorandéEdición Limitada Cabernet Franc 2006, Maipo.
Frutas rojas frescas y dulces se sienten en un comienzo, acompañadas de aromas a madera. En la boca es jugoso y maduro, con un cuerpo grande que se acentúa gracias a una textura joven, astringente. Un cabernet franc para longanizas. $10.790 (Wain | Tottus).
87 ChocalánReserva Cabernet Franc 2006, Maipo.
Un cabernet franc con dos caras. La primera son sus perfumados y delicados aromas a flores y especias en la nariz. La otra es su boca firme y tánica, con una fuerza de mucha fruta concentrada. $6.990 (Wain)
90 Loma LargaCabernet Franc 2007, Casablanca.
Un excelente exponente de tinto de clima frío, aquí lo que se siente son hierbas y frutas rojas maduras en un cuerpo intenso, marcado por una acidez que levanta el frescor general de este vino denso y casi untuoso. $14.745 (Mundo del Vino | Lider)
87 Casa SilvaGran Reserva Petit Verdot 2006, Colchagua
Este petit verdot necesita tiempo en la botella para desplegar lo que tiene. Por el momento es pura fuerza, aromas negros y potencia en el paladar. Es un infante musculoso que crecerá en complejidad con dos a tres años de botella. $7.290 (Mundo del Vino).
92 De MartinoEl León - Single Vineyard Carignan 2006 Maule Tiene la rusticidad de la cepa, esa textura astringente, salvaje, y también ese lado fresco, ácido, potente pero muy afrutado, lleno de aromas a frutas rojas dulces. Un vino severo para carne grasa y un excelente ejemplo de la búsqueda de esta viña por vinos con carácter. $14.045 (Wain | Mundo del Vino).
88 J. F. LurtonHacienda Araucano Cabernet Franc 2007, Lolol.
Muy en el estilo fresco de los vinos de Lurton, aquí se mezclan notas florales y frutas rojas maduras. El cuerpo de mediana intensidad y la acidez severa piden algo de dulzor para contrarrestar. Un cerdo en salsa de tamarindo podría ser. $8.500 (Mundo del Vino)
87 Odfjell Orzada Cabernet Franc 2004, Maule.
Tiene aromas a tabaco y clavo de olor, mientras que los sabores se sienten llenos de fruta bien negra y madura. Necesita carne para calmarse. $9.800 (Wain | Mundo del Vino).
86 Gillmore Hacedor de Mundos Cabernet Franc 2006, Loncomilla.
Goloso, invernal, lleno de aromas maduros, con una textura que raspa la lengua. Necesita un buen corte de cordero. $9.900 (Wain | Mundo del Vino).
Wednesday, July 01, 2009
Cantinfleos en el mundo del vino
estimados todos,
les dejo un artículo casi obligatorio de leer
me hizo recordar muchas reflexiones sobre esas "complejas descripciones" de los sabedores de vinos, llenas de metáforas, palabras raras, situaciones y recuerdos
mientras más leo a los que realmente saben de vinos, los que los hacen, más confirmo que lo importante y central es si el vino fue de nuestro o gusto o no: así de simple, así de subjetivo
Vinorama: Sobre el engrupir al hablar de vinos
les dejo un artículo casi obligatorio de leer
me hizo recordar muchas reflexiones sobre esas "complejas descripciones" de los sabedores de vinos, llenas de metáforas, palabras raras, situaciones y recuerdos
mientras más leo a los que realmente saben de vinos, los que los hacen, más confirmo que lo importante y central es si el vino fue de nuestro o gusto o no: así de simple, así de subjetivo
Vinorama: Sobre el engrupir al hablar de vinos
Mapas del vino
soy un fanático de los mapas, y estoy convencido que el formato visual es muy útil a la hora de presentar datos e información compleja o muy diversa
al respecto, les dejo algunas aplicaciones de ese tipo:
al respecto, les dejo algunas aplicaciones de ese tipo:
Dr. Vino, tiendas en New York
Dr. Vino, tiendas en Chicago
seguiremos buscando datos de este tipo
SALUDOS A TODOS!
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